Tema 4: La adquisición y el desarrollo del lenguaje

Existen alrededor de 7000 lenguas en todo el mundo. Sin embargo, los niños son capaces de desarrollar la lengua a la que son expuestos. A este proceso se le denomina adquisición del lenguaje. La adquisición no debe de ser confundida con el aprendizaje, dado que, mientras la primera va de dentro hacia afuera, siendo un proceso inconsciente, logrado por la exposición del uso natural de una lengua perteneciente a una comunidad; el segundo va de fuera hacia dentro, tratándose de un proceso consciente mediante la reflexión sistemática y guiada, a través de la instrucción formal, de los elementos de un sistema lingüístico.

La lengua que adquirimos se denomina lengua materna, natural o nativa, y se opone a las segundas lenguas, las cuales sí se aprenden tras haber finalizado el periodo crítico.  

Además, el lenguaje se desarrolla en los seres humanos gracias a la conjunción de la biología y del entorno. La cuestión fundamental es determinar el peso de cada uno de ellos en la adquisición de la lengua materna. Para ello se crearon diversas teorías a lo largo de la historia como: posturas innatistas, las cuales defienden que la facultad del lenguaje está biológicamente determinada en la especie humana; teorías interaccionistas, las cuales dicen que, o bien es únicamente debido a los estímulos externos por los que se adquiere y desarrolla una lengua (postura conductista), o que, a pesar de existir un componente innato, para lograr su desarrollo es imprescindible recibir una interacción lingüística intensa y directa por parte de las personas del entorno (enfoque moderado); y teorías emergentistas, las cuales piensan que no solo no existe una facultad innata predeterminada, sino que tampoco se trata de una conducta aprendida, ya que, se emplean mecanismos cognoscitivos básicos como la memoria o el reconocimiento, dando como resultados el aprendizaje de vocabulario y la adquisición de una gramática.  

Sin embargo, algunos de los argumentos en los que se apoyan estas teorías, se han probado erróneos con el paso del tiempo. Un ejemplo de esto es la postura interaccionista con el maternés (manera especial en la que se dirigen los padres hacia sus bebés), quienes defendían que debido a ello los niños adquirían el lenguaje. Pero, debido a que en algunas culturas no existe el maternés y los niños, aún así, son capaces de adquirirlo, se probó que esto era falso y, por tanto, aunque su uso pueda facilitar el proceso, no es determinante.

En cualquier caso, existen una serie de características del proceso de la adquisición del lenguaje, siendo éste universal, relativamente rápido (3-4 años) y uniforme, tanto en las etapas del desarrollo (nivel interno), como en la variabilidad de la experiencia (nivel externo).     

La primera tarea que deben de realizar los niños para lograr la adquisición del lenguaje es aprender a separar las voces humanas de otros sonidos, siendo conscientes de que estas pueden variar en tono, intensidad y rapidez, por lo que estos elementos no son relevantes a la hora de discriminar los sonidos. Además, tienen que ser capaces de segmentar la cadena oral.

Podemos distinguir 2 etapas en la adquisición de la lengua materna: la prelingüística y la lingüística. 

La etapa prelingüística trascurre durante los primeros 12 meses de vida. En ella, los niños comienzan a ser más sensibles a la lengua. Este periodo, a su vez, se subdivide en varias etapas:  

  1. Etapa fonatoria o de vocalizaciones reflejas (0-2 meses): los bebés tienen un amplio repertorio sonoro de tipo reflejo ante las necesidades biológicas.   
  2. Etapa de arrullos y risas (2-4 meses): se produce una maduración de la laringe, permitiendo producir sonidos casi vocálicos, extendiéndose más allá de los estrictamente reflejos. 
  3. Etapa de expansión fonética, juego vocal incipiente (4-6 meses): se producen sonidos voluntarios, siendo estos los primeros intentos por controlar la sonoridad y los movimientos linguolabiales.
  4. Etapa de balbuceo canónico o reduplicativo (6-10 meses): hay una repetición de los "gestos articulatorios" con estructura segmental CV (consonante - vocal) repetida, con diferente velocidad, ritmo o entonación. Los niños sordos también balbucean.
  5. Etapa de balbuceo melódico o conversacional (10-12 meses):  las emisiones silábicas se prolongan, se  vuelven más complejos y se asemejan más a los propios de la lengua del entorno. A los 12 meses surge la primera palabra. Los niños sordos detienen su balbuceo.

Por tanto, los bebés, durante la etapa prelingüística, en un principio, son oyentes universales, siendo capaces de distinguir y discriminar sonidos de otras lenguas; cuando comienzan con el balbuceo canónico se convierten en hablantes universales, pudiendo producir sonidos en otras lenguas; pero, finalmente, esa capacidad disminuye, ya que los niños se sintonizan con el entorno, transformándose así en hablantes-oyentes de la lengua materna. 

Respecto a la etapa lingúística,  en ella también podemos encontrar varios periodos:

  1. Etapa holofrástica (12-18 meses): los bebés asocian una secuencia de sonidos a un amplio conjunto de situaciones comunicativas, logrando así aprender sus primeras palabras. Emplean una única palabra para expresar lo que adultos harían con frases completas, es decir, hacen uso de holofrases. Para ello, es necesario que antes sean capaces de segmentar la cadena hablada en palabras. Es en este periodo en el que los niños empiezan a adquirir un ritmo muy rápido de la lengua, construyendo así su lexicón. Además, suelen utilizar gestos ostensivos para acompañar estas holofrases. También, es importante destacar que los niños, al aprender palabras, tienen un precondicionamiento cognitivo que les hace asociar esta al objeto completo y no a una parte determinada de él. 
  2. Etapa telegráfica (18-24 meses): suele carecer de marcas gramaticales. Comienzan las primeras locuciones de dos palabras con un orden correcto, ya que establecen un parámetro de la dirección del núcleo. Todavía no hacen uso de algunas palabras como auxiliares, adverbios... 
  3. Otras etapas: a partir de este punto las etapas dejan de tener nombre y, en su lugar, comienzan a enumerarse. Estas se determinan calculando un parámetro cuantitativo denominado Longitud Media del Enunciado (LME), el cual es obtenido tras grabar 50 enunciados y dividirlos en función del número de palabras que aparecen en ellos.  Estas otras etapas con las que podemos encontrarnos son:

Fase I 

Tiene lugar alrededor de los 2 años, siendo su LME de 1'75 palabras, es decir, que emplea una o dos palabras en sus enunciados, aunque también aparecen las primeras combinaciones de tres. 

Fase III​ 

Empieza alrededor de los 3-3'5 años y su LME se encuentra en 2'75, diciendo ya, el niño, casi siempre tres palabras. Aparecen los verbos auxiliares y las preguntas.

Fase V 

Aparece alrededor de los 4-5 años y su LME es de 4 palabras. El niño comienza a utilizar una variedad de oraciones compuestas, tiene capacidad de reflexión y se ha convertido en un hablante adulto, habiéndose alcanzado su núcleo de competencia lingüística, aunque todavía puede aprender cosas nuevas respecto a la lengua.  

Fase II 

Comienza alrededor de los 2'5-3 años y su LME es de 2'25 palabras, por tanto, en la mayoría de los enunciados emplean únicamente dos palabras, haciendo también uso, en ocasiones, de tres. Aparecen palabras funcionales como los demostrativos, las sobrerregularizaciones o los sujetos tácitos. Además, el niño ya es capaz de recuperar los sujetos tácitos de las oraciones mediante la información de persona y número expresada en el verbo. 

Fase IV 

Se inicia alrededor de los 3'5-4 años, con un LME de 3'5 palabras. Comienzan a producirse las primeras oraciones compuestas como las coordinadas o de relativo. 

Por último, es importante mencionar que el desarrollo del lenguaje del niño pasa por dos etapas. La primera es la del lenguaje egocéntrico, en la que el niño no se preocupa por el punto de vista del interlocutor, sin darle importancia a saber a quién habla ni de ser escuchado. Con el paso del tiempo, este lenguaje egocéntrico va desapareciendo hasta convertirse en un lenguaje socializado, haciendo uso de información adaptada, preguntas y respuestas, órdenes, ruegos y amenazas, críticas o burlas, etc.  

Durante el trascurso de este tema podemos destacar el desarrollo de un par de actividades. 

La primera de ellas consistió en realizar una transcripción fonética. Para ello, antes dimos una serie de contenidos impartidos a través de un pequeño tema previo. 

Para empezar, se nos presentó la diferencia entre un grafema o letra "a", un sonido "[a]" y un fonema "/a/". 

También analizamos las definiciones de dos disciplinas: la fonética y la fonología. La primera es una disciplina física, encargada de estudiar los mecanismos de producción y percepción de los sonidos de las lenguas orales; mientras que, la segunda, es una disciplina abstracta, la cual estudia como se estructuran estos sonidos en la competencia de los hablantes para pronunciarlos.  

Tras ello, dimos como los fonemas se descubren empleando técnicas denominadas "pares mínimos", es decir, una técnica en la que en un par de secuencias únicamente difiere uno de sus elementos.    

Asimismo, nos fue explicado que la fonética puede ser articulatoria, cuando se encarga de la producción o articulación de los sonidos, o acústica, cuando se ocupa de las características físicas de la onda sonora generada por la articulación de estos.

En la segunda actividad, tratamos el tema de las fases de adquisición del lenguaje, ya que esta consistió en escuchar una serie de audios de diferentes niños con el objetivo de determinar la etapa en la que se encontraba cada uno de estos, pudiendo observar casos muy variados, dado que, mientras algunos todavía se encontraban en fases prelingüísticas, otros ya estaban en la etapa lingüística.  

A continuación, examinamos la caja de resonancia humana, la cual está compuesta por la garganta o cavidades glóticas (laringe y glotis), las cavidades supraglóticas (cavidad oral y nasal) y por las cavidades subglóticas o infraglóticas, es decir, los pulmones.

Además, nos fue impartido que, para articular los sonidos, intervienen 3 procesos: el de generación de la corriente de aire, también conocido como espiración; el de fonación, mediante la vibración de los pliegues vocálicos; y el de articulación, para el que es imprescindible un órgano muy importante, la lengua.

Por último, se nos explicó que para estudiar los sonidos del español, se tienen en cuenta los siguientes tres parámetros:

  • La actividad de las cuerdas vocales: identificando la vibración de estas.
  • El punto de articulación: teniendo en cuenta el lugar de la cavidad oral donde se produce la obstrucción para que salga el aire, produciéndose así los sonidos labiales, dentales, alveolares, palatales y velares.
  • El modo de articulación: teniendo en cuenta la forma en la que el aire sale a través de la cavidad oral, pudiendo ser los sonidos: oclusivos (cierre total), fricativo (cierre parcial), africado (combinación de los dos anteriores), nasal (similar al oclusivo pero el aire es expulsado por la nariz, mientras el canal bucal permanece cerrado), aproximante (consonantes oclusivas entre vocales, con ausencia de fricción y turbulencias), consonantes laterales (el aire sale por el lateral de la boca, permaneciendo obstruido el canal central) y róticas o vibrantes (el canal oral se cierra y abre sucesivamente).

Como conclusión, tras haber finalizado este tema, me gustaría decir que este es fundamental en la asignatura, debido a que en un futuro, cuando estemos ejerciendo como docentes, debemos de estar capacitados para poder identificar rápidamente un correcto desarrollo en el lenguaje de los niños y, para ello, es imprescindible conocer cuales son las etapas de este desarrollo. Gracias al tema aprendí un dato que desconocía y que particularmente me llamó la atención, y es que los niños sordos también balbucean aunque posteriormente dejen de hacerlo. Respecto a las actividades, me gustaría destacar la realizada acerca de las fases de adquisición del lenguaje, por los motivos que anteriormente ya he mencionado.

© 2019 Universidad de Alcalá
Creado con Webnode
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar